Contenidos
Introducción.
Mamá, ¿Cómo medimos el amor? es un cuento para mamá y especialmente para el día de la Madre.
¿Cómo demostramos nuestro amor a las personas que más queremos? Un pequeño diálogo entre madre e hijo/a para aprender a manejar nuestros sentimientos. Con una buena actitud podemos hacer que nuestras vidas estén repletas de amor y felicidad.
Cuento. Mamá, ¿Cómo medimos el amor?
– Mamá, ¿Se puede medir el amor?
– No cariño, el amor no se puede medir, el amor no se ve, ni se toca. El amor se demuestra.
– ¿Cómo?
– Pues cada día, cuando me das un abrazo, cuando me ayudas, cuando te ríes conmigo…
– Pero yo quiero medir el amor, para enseñarte lo mucho que te quiero.
– Bueno, si quieres podemos crear un metro imaginario para medir nuestro amor.
– ¡Vale! ¡Qué divertido!
– Pero se tratará de un metro mágico y muy difícil de manejar.
– ¿Por qué es difícil de manejar?
– Pues verás, este metro mide tanto para delante como para detrás. Cada vez que demuestres tu amor a mamá o mamá te demuestre su amor, el metro se hará más largo. Pero, si por el contrario, nos enfadamos o nos tratamos mal, nuestro metro mágico se hará más y más pequeño.¿Quieres probar?
Mira, esta cuerda servirá. Al final de cada día tú y yo seremos responsables del tamaño de nuestro metro. Cuanto más amor nos demostremos, más grande se hará nuestra cuerda e iremos añadiendo nuevos trozos de cordel para hacerla más y más grande.
– Si, ¿pero qué pasa si me pides algo y yo no lo quiero hacer?
– Bueno, muchas veces nos pides cosas a mamá o a papá y nosotros siempre te intentamos ayudar, aunque estemos haciendo otras cosas… ¿verdad?
– Sí
– Pues eso también es demostrar amor y ya sabes, si demostramos amor nuestro cordel crecerá.
– Vale….
– ¿Y si yo quiero hacer algo y tú no me dejas porque tenemos que hacer otra cosa?
– A veces yo quiero descansar, pero tú no me dejas porque tengo que llevarte a un cumpleaños, prepararte el baño, la mochila para el día siguiente ….
– Ya, ya entiendo, ¡eso también es demostrar amor!
– ¡Muy bien! Creo que ya estamos preparados para utilizar nuestro metro mágico del amor.
– Mamá, creo que deberíamos llamarlo nuestro metro de la felicidad. Porque siempre que me demuestras tú amor yo me siento feliz.
– Pues claro, ¡qué buena idea! A partir de hoy nos demostraremos todo nuestro amor a diario, para hacer crecer nuestro metro de la felicidad.
FIN
Autora: Beatriz de las Heras García
Be the first to comment